Turismo y Cultura Amazónica

¡Lafua los Yacuteros…!.


Escribe: El Mashita Jergón

¡Ah burro hom…! di cumpitas, lo que no hay agua en toda la selva, porque esos disparates y manavalques de gentes, queman los bosques para hacer chacras en la misma cabecera de los ríos, que ya se están secando y cada día están más tipi cintura, igual que esa negrilla de la bajadita de Shango en Moyobamba, por la que mi cumpa Betillo Cabrera ya va morirse y está una trilla su vida.

Aishtá el otro día mashas, malísimo me ha dado pena el río Cumbaza en Tarapoto, cuando me ido con una huambra para estar conversando viejo viejo a la orilla del río, para hacerle animar…inllá cumpas, nos hemos tenido que regresar, porque ahí botan la basura algunos grajos y ese olor nos hace torcer nuestra singa; así es que no hemos podido hacer ningún avance mashitas.

Igual sucede en Moyobamba con la famosa quebrada de Rumi-yacu, donde nos íbamos a bañarse de muchachos cotonsapas y ahora parece su cunga de esa arpa raca de Miriam Chumbe, que a propósito prepara esa patarashca de gamitana con su ajicito de cocona, lo que no se le aguanta su ricura… su ishpa ya creo le echa esa eteca… santa maría, madre de Dios…

Y en Rioja cumpas, el río Indoche está igual y ahí también botan basura esos grajos, concha de sus vidas. Por eso ahora estamos jodidos sin agua y si seguimos así vamos a tomar su ishpa del chancho, ni siquiera de tu ñañita… algo tenemos que hacer de una vez por todas y dejémonos de huevadas, para salvar a nuestra amazonía.

Lafua mi comadre Rosita Ishpatera, una semana ya creo no baña como dice el tarapotino y medio sobaquinienta ya huele, erra cunga está andando en su huerta queriendo chupar naranja y la Juanita Illurra, que es una yacutera de primera, ha decidido ir a lavar su ropa, incluido ese calzoncito celestito de su hijita, en el chorro de caparina, a la antigua, y de ahí viene cargando su batea con esa cachipurilla, lo que parece todo su qué y nos hace tragar nuestra saliva… viejo verde antojero, nos ha dicho la otra tarde, cuando nos ha pillado ñahuincheándole…

Y en la casa cumpitas, hay que recoger ya pues nuestra agua levantándose a la tres de la mañana…para que nos de pulmonía así… y llenar nuestro porongo y nuestro bidón y bañarse con pate como en los viejos tiempos y shal, shal, shal, nomás, porque esos disparates que administran el agua nos dan un ratilillo. No nos alcanza ni para lavar nuestra talega y la vieja le hace semanear a su calzón. No podemos hacer nuestra necesidad a cada momento, nos vez no hay agua para bajarle… felizmente mashitas yo todavía tengo mi silo en la huerta, aunque a veces nos siga el shingo.

Pucha cumpas, creo que vamos a volver a esos tiempos mozos en que nos bañábamos en el chorro caparina, chapaneándole a la Chavelita, para mirarle un pedacito de su chuchito y su changa lo que brilla… malay esos tiempos¡¡¡ y pensar que la Chavela ahora está viejita y su chucho colgado, gorrrda la majadera y claro, después de 7 hijos de uno y otro, no es fácil la vida y pensar que todo el mundo le echaba ojo a esa huambra que era la muchacha más guapa de la vida… de la vida así serías…!!!

Y lo que traíamos nuestra agua en esos peroles di cumpitas, machazos carajo, subíamos esa lomada de esos barrancos de un solo tiro y hacíamos dos viajes desde las 5 de la mañana y a veces tan solo para mirarle a esa negrilla de tu primita, lo que subía la cuesta botando su ojete y cargando ese cántaro con agua, que le hacía más linda que nunca. Y tú no sabes huevón, esa mañana que le di una sola chupeteada para que se acuerde toda su vida, santísima virgencita del perpetuo socorro, cosas ya me estoy acordando por este asunto del agua.

Y dice cumpas, que por el agua ya van a ser las guerras y vamos a pelear igual que los isuizas con los manuaris, porque el que tiene agua va a tener poder y nosotros teniendo la posibilidad ahurita de cuidar nuestra agüita, para que puta ya pues le desperdiciamos, botamos basura a los ríos, quemamos los bosques, deforestamos la selva, destrozamos árboles de miles de años y esos disparates de alcaldes, botan árboles para poner cemento y nosotros mismos, botamos botellas y bolsas de plásticos en las carreteras y las calles, a sabiendas cumpitas, que eso es lo peor que podemos hacer… ponerles en sus cabeza así esas bolsas para que se asfixien de una buena vez, por burros y asesinos del bosque.

No hay vuelta que darle mashas, la selva, la amazonía, necesita de leyes más drásticas contra la deforestación, el tráfico de madera y contra quienes destrozan nuestra propia casa y a esos alcaldes shihua ojetes, hay que exigirles que respeten nuestros parques y que no se bote ni un solo árbol en la ciudad.

Tanto ya pues no les gusta vivir lindo mashas, en medio de su tronco de la naranja o su tansharina, de su paltapaca o de su casho, lo que nos da sombra y podemos hacer nuestro jugo a la hora que nos antojemos, mirando por la rendija de nuestro cerco lo que se baña su hijita de mi cumi Rosita Ishpatera y quedarse con las ganas de sobarle su espaldita… allaón esa muchachita… a sabiendas que les estamos mirando, se soba y se agacha la majadera… para que se pare nuestro corazón así mashas… eso de bueno ya vuelta tiene que no haya agua.

El otro día estuve dando una vuelta por Saposoa y casisito me muero de la calor mashitas, qué bestia lo que no he podido ni respirar, no había aire, ni vientito y a mi amiga Noylí del stone le he pedido que me eche aire aunque sea con su calzón y encima no había ni una gota de agua en el hotel y así pasa por Juanjuí, Bellavista, Picota, Yurimaguas y Punchana, aunque felizmente aquí en Talega yacu, donde tengo mi tambo, vivo feliz, sin que nadie me joda, en medio de árboles y en su ladito del río Mayo, cerquita a Tingana, donde anzueleo al atardecer unos pejes para comer frito con su arroz caliente y si me visita alguna shullita, le preparo su arroz baleado con su cajué ñucñulla, nos bañamos en el río calatitos y dormimos apegados cerca de la tullpa... esa vidita pué te gusta, me dice la doña cuando no me regreso de la chacra semana entera… que ya pué me voy a regresar mashitas, cuando el majacito está comiendo su bellaco… alaba ojete me dice la Juanita Illurra cuando le cuento, de puro envidiosa.

Voyá mashas a recoger mi agua, porque aquí en la ciudad dan una sola vez al día y tendal ya está la ropa con todo del nieto, porque a mi hijita, la ultimilla, le han hecho olvidar a la pobre y de vez en cuando, vengo (vengo eres) a engreírle a mi muchachillo… Santo Toribio de Mogrovejo… y dicen que a este santo mashas, los moyobambinos no le han querido dar agua y dañando su cara, les ha dicho, que algún día les va tragar el barranco… por eso mashitas, aunque no tengamos agua, han de ofrecer siempre a la gente un tipishillo, de tu cantarito de Chazuta, igual que mi amiga Silvita Moreno, no mezquines, acuérdate de la Biblia lo que dice: “no le niegues agua al peregrino”.

Ahora si voyá mashas, aunque en esta sequía tengo ganas de hacerle un patito yacuna a la Anita la voladora, que cada día le veo más timbirina que ayer y eso le hace más bonitilla… voyaaaaaaaaá agua ojetes…

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